Alberto Tovar Castro, catedrático del Tecnológico de Monterrey, comentó que resulta inconveniente aislarse de las ventajas como herramienta financiera a pesar de que el crédito al consumo a través de las tarjetas es el más caro del mercado y dependiendo del banco puede alcanzar una tasa superior al 50 por ciento.
Un ejemplo es que el crédito permite tener cubiertas las contingencias. Y es que ante una eventualidad hospitalaria o viaje imprevisto se puede recurrir a su uso. “De hecho, aun cuando tenga un seguro de gastos médicos mayores, le piden algo en garantía”, dijo.
Por esta razón, Tovar Castro propone que bien administradas, pueden brindar un beneficio, por lo que expone las principales razones para utilizar una tarjeta de crédito.
En primer lugar, mencionó que bien administradas permiten tener un financiamiento sin intereses, siempre y cuando se pague el saldo completo en cada corte. Lo importante es saber cuál es la fecha exacta en que se hace el mencionado corte, pues todas las transacciones después de ese día pasan hasta el siguiente estado de cuenta.
También la mayoría de los plásticos tienen opción de recompensa. En algunos casos es a través de puntos que se convierten en dinero en efectivo; en otras es con premios específicos o millas para viajar. “Si esto se combina con el punto anterior, resulta que hasta le pagaran para usarla”, consideró el catedrático.
Otra razón para utilizar una tarjeta es que da la facilidad de llevar un registro exacto de los gastos y con ello apoyar su análisis y corrección. Este es un excelente insumo para la elaboración de presupuestos familiares. Si se archivan, son fácil de consultar para saber a dónde se está yendo el dinero y hacer los ajustes necesarios.
Y sobre la disposición de efectivo, el experto en finanzas mencionó que aunque tiene un costo alto, resuelve algún tipo de problemática inmediata, que de otra manera podría significar un “dolor de cabeza mayor”. Es una práctica que se recomienda hacerla con prudencia por los costos de la comisión.
Otra ventaja que resaltó Tovar Castro es la seguridad con el manejo de los recursos, en términos de robo y de extravío. La mayoría de las tarjetas tienen seguro contra estos percances, siempre y cuando se reporte a tiempo.
Así mismo, este instrumento es básico para viajar y documentarse en hoteles. Además es prácticamente imposible rentar un auto sin tarjeta de crédito. Por tanto, es útil para manejar recursos en el extranjero, pues casi todas están avaladas por Master Card o Visa, lo cual ayuda para hacer viajes internacionales y evitar problemas de efectivo. “Se sugiere tener cuidado en el momento en que el tipo de cambio tenga cierta inestabilidad”, especificó Tovar Castro.
Una razón más reside en la comercialización por Internet, ya que el plástico ayuda para hacer las operaciones. La mayor parte de los bancos tiene cubierta la posibilidad de uso indebido y tienden a corregir rápidamente este tipo de eventos.
Por otra parte, el catedrático enfatiza que es fundamental tener un historial crediticio y las tarjetas son una de las vías, siempre y cuando no se exceda. De esta forma resultaría peor si resulta con algún señalamiento en el buró de crédito.
Por esta razón, refirió que es recomendable tener cuidado con el límite de crédito para evitar riesgos excesivos de clonación y también porque eleva el pago mínimo requerido por el banco. Y en caso de que sólo se tenga como respaldo, Tovar Castro sugirió hacer un uso al menos esporádico para evitar problemas cuando se quiera utilizar, pues el banco puede suponer un mal uso y declinar la operación.
