La periodista dictó la ponencia “Mujeres ilustres en México” ante estudiantes del IEU.
La historia de nuestro país ha evidenciado que lamentablemente cuando las mujeres en el arte y las letras son subversivas por índole propia, son libres y rebeldes, la sociedad en general las rechaza, las “tacha de locas” y nunca las ayuda a realizarse, aseveró la escritora y periodista Elena Poniatowska, durante la ponencia titulada “Mujeres ilustres en México”, que dictó ante estudiantes y profesores del Instituto de Estudios Universitarios (IEU).
La periodista, refirió que en la década de los 30 y 40, era muy difícil para las féminas realizarse, salir de la casa y romper las convenciones, ya que vivían en una sociedad muy cerrada que dictaba que las mujeres tenían que cumplir con la regla de ser como la “escopeta”, cargada y en un rincón, es decir, ser madre de familia y tener hijos.
Sin embargo, Elena Poniatowska subrayó que pese a ello, las mujeres siempre lograron desarrollarse en el arte y las letras, tal es el caso de muchas de ellas que dejaron huella con sus legados en la Revolución Mexicana, en otros ámbitos y momentos de nuestro país.
“Las mujeres ilustres en México son las que están trabajando, educando a mejores ciudadanos. Lo que salvará a nuestro país es la educación, los felicito por estar en el Instituto de Estudios Universitarios, porque si se educan saldrán adelante, si se educan serán buenos padres de familia y al mismo tiempo se salvarán así mismos y a México que necesita gente preparada como ustedes”, destacó.
Durante su disertación, Elena Poniatowska recordó e hizo un homenaje a todas las mujeres escritoras de México, de quienes dijo, han aportado de una u otra forma al desarrollo de la nación. Rememoró a Nellie Francisca Ernestina Campobello Luna, escritora y poeta mexicana, “fue la única autora de la Revolución Mexicana, porque hizo entrega del archivo de la vida de Pancho Villa a Martín Luis Guzmán autor de las memorias de Pancho Villa”.
Otra de las mujeres ilustres ha sido Rosario Castellanos, promotora cultural, quien tuvo que vivir las mismas condiciones a las que se enfrentó Sor Juana Inés de la Cruz, porque tuvo que escribir en medio de la clausura para ejercer su profesión. “A estas dos mujeres, el mundo las defraudó, porque se enfrentaron a una realidad aterradora, la mujer no era considerada igual que el hombre, era inferior y por lo tanto se le calificaba de no tener la misma capacidad para pensar y mucho menos para crear”, indicó.
Recordó que los críticos han sido injustos con las escritoras, entre muchas otras, con Maria Elvira Bermúdez, abogada de profesión y una de las primeras mujeres que fue a la universidad en nuestro país y considerada como la Agatha Christie mexicana. “En general, muchas mujeres permanecen en la obscuridad, tienen hacia ellas una actitud muy injusta, una situación que no se merecen vivir. Las escritoras mexicanas abandonaron la literatura de confesión”, agregó.
Dijo que a la par también están mujeres como Elena Garro, Luisa Josefina Hernández, Maria Luisa Mendoza “La China”, Angelina Muñiz, Margo Glantz, Myriam Moscona, entre muchas otras más que han hecho aportaciones a la sociedad.
Cabe señalar que durante el mensaje de bienvenida a Elena Poniatowska, el Rector del IEU, Mauricio García Acevedo, subrayó que “a lo largo de la historia y desarrollo de nuestro país, las mujeres han jugado un papel importante, desde la época prehispánica hasta nuestros días, sus acciones y aportaciones han incidido en la transformación de nuestra sociedad.
Agregó que la presencia de la mujer no solo ha sido importante en la vida política del país, también en el ámbito económico: según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, en 2012, cuatro de cada 10 mujeres mayores de 14 años trabajan. El 91.9% combina trabajo y estudio con quehaceres domésticos. Asimismo, el 7.7 por ciento de las mujeres han logrado ser presidentas municipales.
“Sin duda, las mujeres seguirán ocupando un papel importante en la sociedad mexicana. Sin embargo, para tener una sociedad más justa y equitativa, se requiere que mujeres y hombres contribuyan en igualdad de condiciones en la construcción de un mejor país”, concluyó.
