La física definitivamente tiene relación con la invisibilidad, “ya que existen bases físicas para crear un manto de invisibilidad”, declaró el doctor Rubén Barrera Pérez, académico del Instituto de Física de la UNAM.
En una charla impartida ante jóvenes reunidos en el Instituto de Física “Luis Rivera Terrazas” de la BUAP, indicó que para fabricar este manto basado en el comportamiento de la luz y materiales con ciertas propiedades, se requerirían materiales que no existen en la naturaleza.
Habría que hacerlos y se entraría al tema de los metamateriales, porque tendrían una polarización idéntica a la propiedad de magnetización, así como un comportamiento y distribución espacial y angular específica, dependiendo del objeto que se desea hacer invisible.
“Se requiere que la luz se doble alrededor de los objetos e inhiba su reflexión”, por lo que esa zona donde se dobló la luz sería invisible para el observador.
El investigador planteó que se tienen algunos avances al respecto como un cilindro de cobre fabricado con metamateriales, así como tapetes de invisibilidad. Posteriormente, “se tendrán más avances porque hay mucha gente trabajando en este tema y es posible que aparezcan nuevas ideas; se tienen bases sólidas para continuar investigando”.
Previamente, Barrera Pérez explicó que la invisibilidad es un tema que ha cobrado importancia, puesto que ser invisible “es un sueño de varios años”. Es una fantasía tan seductora porque implica hacer algo sin que nadie se dé cuenta y sin ser descubierto.
Esta idea aparece en diversas historias y películas, donde se plantea como una acción maléfica, excepto en una película de un mago cuando se utiliza para saber la verdad de una situación.
Comentó que a finales del siglo XX, la invisibilidad científica se convierte en un tema literario y aparecen obras como El hombre de cristal; al igual que en películas.
La invisibilidad como ficción comienza a tener, en estas obras literarias, un poco de racionalidad. Por ejemplo, el químico Lloyd Inwood, personaje de The shadow and the flash, logra ser invisible cubriéndose con un pigmento que absorbe toda la luz. Así que en las obras se tienen dos postulados: un pigmento que absorbe la luz y otro que la deja pasar.
Más tarde, el académico de la UNAM planteó algunos aspectos de física: qué es la luz, cómo se ve y qué es la transparencia, entre otros conceptos que dieron paso a plantear una idea científica de la invisibilidad. Al final agradeció ser invitado a participar en las actividades del IFUAP que se realizaron en memoria del ingeniero Luis Rivera Terrazas.