En Puebla, de acuerdo a su situación conyugal, la tasa de participación económica – que trabajan para solventar la manutención de sus hijos- más alta se da entre las madres solteras (78.2%), es decir 8 de cada 10, seguidas por las separadas, divorciadas y viudas (49.5%), en tanto que las actualmente unidas muestran una tasa de 39.1 por ciento.
La composición de la población económicamente activa de las mujeres con hijos señala que 96.6% participa en la producción de bienes y servicios (población ocupada), en tanto que el restante 3.4% restante buscan trabajo.
El tipo de unidad económica donde laboran las mujeres con hijos indica que 29.5% trabaja en empresas y negocios y una proporción mayor (38.7%) labora en el sector informal; mientras que las mujeres que no tienen hijos trabajan en mayor medida en empresas y negocios (42.8%) y sólo dos de cada siete (29.0%) se inserta en el sector informal.
Otros aspectos que hay que destacar entre las trabajadoras con hijos y sin hijos es que en las primeras 22.7% tienen primaria incompleta y sólo dos de cada nueve (22.3%) cuenta con estudios a nivel medio superior y superior; en tanto que en las mujeres sin hijos, la proporción con primaria incompleta disminuye a 7.7% y las que cuentan con estudios a nivel medio superior y superior aumenta a 39.3 por ciento.
Sólo 2 de cada 9 poblanas en edad fértil con acceso a instituciones de salud
Muchas mujeres trabajadoras no cuentan con la protección de alguna institución de seguridad social, en el segundo trimestre de 2009, sólo dos de cada nueve mujeres en edad fértil (15 a 49 años) que tiene alguna ocupación o empleo cuentan con acceso a instituciones de salud otorgados por su trabajo. Este contexto provoca que 65.9% de ellas, según datos de la Encuesta Nacional de Empleo y Seguridad Social (ENESS) 2009, no obtengan la licencia médica cuando la requieran por parto o por complicaciones del embarazo y aborto.
En 2010 ocurrieron 65 defunciones por complicaciones del embarazo, parto o puerperio, con este número de defunciones, la razón de mortalidad materna en Puebla es de 59 fallecimientos por cada cien mil nacidos vivos. El embarazo de las adolescentes y de las mujeres que se encuentran al final de su periodo reproductivo es particularmente de alto riesgo, se observa que la razón de mortalidad materna en las adolescentes de 15 a 19 años y en las mujeres de 40 a 44 años es de 64.9 y 78.5 defunciones por cada cien mil nacidos vivos, respectivamente.
Las cinco primeras causas de muerte materna representan 61.5% del total de estas defunciones: la principal causa de fallecimiento se vincula con complicaciones del trabajo de parto y del parto (27.7%); la segunda se asocia a edema, proteinuria y trastornos hipertensivos en el embarazo, el parto y el puerperio (12.3%) y la tercera es la atención materna relacionada con el feto y la cavidad amniótica y con posibles problemas del parto (10.8 por ciento).
Empleadas una de cada dos madres trabajadoras
Por su posición en la ocupación, 51.4% de las mujeres ocupadas con hijos son subordinadas y remuneradas, 29.3% trabajan por cuenta propia, 17.3% no reciben remuneración y sólo 2.0% son empleadoras.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), en el segundo trimestre de 2011, en Puebla conforme a su ocupación, la mayor parte de las mujeres con hijos laboran como comerciantes (30.8%), 23.1% son trabajadoras en servicios personales y 17.5% son trabajadoras industriales, artesanas y ayudantes.
Una de cada dos mujeres casadas han padecido violencia
La Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) 2006 señala que en Puebla 52.0% del total de mujeres unidas (casadas o en unión libre) de 15 años y más con hijos refirió haber padecido algún tipo de violencia por parte de su última pareja.
La violencia que más prevalece es la emocional (46.0%) la cual consiste en insultos, amenazas, humillaciones y otras ofensas de tipo psicológico o emocional; le sigue la violencia económica (29.1 por ciento); la violencia física (25.9%) que tiene que ver con empujones, jalones, golpes, agresión con armas, entre otras, y la violencia sexual (9.5 por ciento).
Las mujeres divorciadas, separadas o viudas muestran una mayor violencia ejercida por parte de su última pareja (66.9 por ciento) y la violencia que más prevalece es la emocional (62.2%) y la económica (52.0 por ciento).
El dato
En México, este festejo tiene su origen desde hace 90 años, cuando un periodista llamado Rafael Alducin que trabajaba para el periódico “Excélsior” invitó un 13 de abril de 1922 a toda la gente para que celebrara el día de las madres, festejo que por primera vez se realizó el 10 de mayo.
Durante el siglo XVII, en Inglaterra se celebraba un día llamado “Domingo de servir a la madre”; pero no fue sino hasta 1905 en Estados Unidos, cuando una joven llamada Ana Jarvis, decidió buscar ayuda para destinar una fecha específica para rendir tributo a su progenitora luego que ésta murió, su propuesta iba encaminada a celebrar a las madres el segundo domingo de mayo, correspondiente al aniversario luctuoso de su madre
.
