Después de la presentación en mayo de forma oficial de la Xbox One, muchas incógnitas sobre la nueva videoconsola de Microsoft quedaron solventadas, pero también surgieron otras. Por ejemplo: ¿Por qué tiene unas dimensiones que se asemejan más a las de un set-top box que a las de una consola? La respuesta acaba de llegar a través de fuentes cercanas a los de Redmond consultadas por Digital Foundry.
Según dichas fuentes, la Xbox One no sólo ha sido diseñada para durar diez años, también se marcaron el objetivo de que fuera la más fiable del mercado, tanto que pudiera aguantar encendida ininterrumpidamente todo su ciclo de vida útil sin fallos. Al parecer lo han conseguido, combinando un procesador AMD optimizado mediante un algoritmo, un sistema de refrigeración que mete miedo y una carcasa de grandes dimensiones.
Además, una segunda gran ventaja del buen sistema de refrigeración, los desarrolladores que trabajan con el hardware de la consola explicaron que la mayoría del tiempo es completamente silenciosa, tanto si está en reposo comoa pleno rendimiento.
en conclusión Microsoft quiere recuperar su reputación respecto a la calidad del hardware de la compañía, esa que quedó tocada por el infame anillo rojo de la muerte de la Xbox 360. Estos últimos reportes apuntan a que lo han conseguido, la constatación no llegará hasta que la lancen al mercado a finales de este año. [Digital Foundry]