300 niños y adolescentes de cinco escuelas del municipio de Izúcar de Matamoros participan en programa piloto que coordina el Tecnológico de Monterrey en Puebla para impulsar el desarrollo de competencias lectoras en alumnos de primaria y secundaria en más de 20 estados del país.
El programa, al igual que el existente en la división de Profesional y Preparatoria del Tecnológico de Monterrey, se denomina
“Pasion por la lectura”, y forma parte de la línea de investigación “Legado Base de la Pirámide en el rubro de Educación”, que coordina Guadalupe Villarreal Guevara, y cuyo objetivo principal es aportar las herramientas para que, desde los nueve años, niños de primaria y secundaria cuenten con buenos niveles de fluidez lectora, lectura de comprensión, capacidad para hacer analogías e inferir conceptos.
Y es que de acuerdo al Programa para la Evaluación Internacional de Estudiantes (PISA, por sus siglas en inglés) México ocupa el lugar 48 de 67 países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE por sus siglas en inglés) en cuanto a lectura.
Además nuestro país concentra entre 40 y 50 por ciento de los estudiantes en los niveles más bajos, por ejemplo el 40.1 por ciento en lectura, lo que de acuerdo al Instituto Nacional de la Evaluación para la Educación (INEE), significa que no están preparados para realizar las actividades que exige la sociedad del conocimiento.
Investigación y competencias lectoras
A partir de este contexto, el Tecnológico de Monterrey ha desarrollado una investigación durante más de un año que ha permitido conocer que es a partir de cuarto año de primaria cuando los alumnos necesitan comprender los textos de las asignaturas que tienen un lenguaje académico, conciso, preciso y autoritario.
Así mismo, el alumno en esta edad encuentra que estas lecturas son más largas, complejas y con contenidos densos y específicos, un vocabulario especializado y la estructura difiere de una materia a otra. Por tanto, las habilidades genéricas de comprensión antes adquiridas no le son completamente útiles para acceder de manera eficiente al contenido de todos los textos de este nivel educativo.
Por esta razón, es necesario brindar a los alumnos las herramientas que les permitirán seguir aprendiendo dentro o fuera de los ambientes educativos formales. Así, la lectura debe permitir que los niños y adolescentes realicen análisis, síntesis, organización y evaluación, además de entender cómo se crean los textos y cómo se transmiten los significados por diferentes medios.
Entre los factores que se deben impactar resaltan la comprensión, habilidad para reconocer palabras, práctica de lectura y monitoreo de la comprensión.
Motivan a leer
Para lograr los objetivos cognitivos, los catedráticos Miguel Ángel Tinoco, Fidel Cázares González y Arturo Temoltzi Torres del Tecnológico de Monterrey en Puebla han recibido capacitación para desarrollar estrategias para la comprensión, análisis de contenidos, requerimientos de vocabulario, la fluidez en la decodificación y refuerzo en la motivación.
Sobre este último punto se organizó un evento masivo en el zócalo de Izúcar de Matamoros, donde se reunió a las autoridades municipales y a los alumnos de escuelas como la Telesecundaria Aquiles Serdán y las primarias David Alfaro Siqueiros y Unidad Miguel Cástulo de Alatriste.
Un grupo de 25 alumnos de las materias de Expresión Verbal en el Ámbito Profesional y Responsabilidad social fueron los encargados de dinámicas lúdicas que generaron el interés por la lectura.
La alumna Ángeles Herrero comentó que las actividades en el zócalo consistieron en hacer que los niños hicieran un dibujo a partir de escuchar una palabra desconocida, para después conocer su significado en el diccionario y así descubrir su verdadera definición. También se hicieron lecturas en voz alta para que los niños se disfrazaran de los personajes.
Dinámicas como “Círculo literario”, permitieron a los niños acomodar las partes del cuento a partir de una lectura previa y después organizarlo para establecer la secuencia correcta. En el caso de “Viajando con los libros”, los niños leían la mitad de un cuento y posteriormente dibujaban la otra mitad de acuerdo a lo que ellos imaginaban.
Y la diversión estuvo presente cuando apareció en escena “Bob”, mascota del Campus Puebla y el grupo representativo de Danza Hawaiana, quienes demostraron que la lectura puede estar acompañada de emoción y entretenimiento.
Sobre la evaluación de las cinco escuelas seleccionadas, Fidel Cázares mencionó que para enero de 2014 se conocerán los índices y el incremento en las competencias lectoras, lo cual será el inicio de la implementación del programa a nivel nacional.