Redacción
De acuerdo con estudios acerca de dolor crónico y agudo en infantes, se sabe que quienes han soportado o sufrido dolor desde la primera infancia sufren repercusiones psicológicas graves a largo plazo, como actitudes de baja autoestima, miedo, distracción e incluso tendencias depresivas aseguró Carlos Marín Moreno, médico del Hospital Universitario de Puebla.
El especialista en tratamiento del dolor, dio a conocer que la percepción del dolor inicia a partir de los seis meses de gestación y puede provocar serias repercusiones psicológicas, como lo indican estudios avanzados de medición de las actividades de la corteza cerebral de los neonatos.
Abundó que desde la séptima semana comienza la percepción de sensaciones alrededor de la boca y posteriormente a partir de la onceava semana en manos y pies, llegando a tener una integración total de las vías completas del dolor a partir de la semana 26, lo que demuestra que es falsa la afirmación de que a un bebé no le duele.
“Hay fibras que son muy rápidas, manejan hasta 25 metros por segundo, si en el adulto tienen que recorrer esa distancia, imagínese en un cuerpo pequeño aún si le falta madurez a ese sistema, no necesariamente requiere estar completo para sentir dolor”, explicó.
Reconoció que el dolor en recién nacidos se infiere, es decir se puede detectar de acuerdo a las actitudes del bebe ante el medio ambiente, “pues sabemos que está bien si come, duerme y tiene una actitud tranquila; pero si hay exceso de llanto o incomodidad se piensa que pueden ser indicadores de dolor en el bebé”.
Abundó que en los partos se anestesia a la madre pero no al bebé y se puede inferir que en el trance de su nacimiento puede sentir dolor, principalmente si se utilizan herramientas como los fórceps para inducir el parto.
Con respecto al “umbral del dolor” explicó que no hay una causa específica para soportar más o menos dolor, sino que el ser humano aprende a manejarlo, “por ejemplo, hay pacientes que en la labor de parto tienen mucho dolor y hay otras que no, para ello además influyen factores como las enseñanzas de una madre, más que umbral del dolor es experiencia y aprender a manejar la cantidad de dolor que se presenta”, concluyó.
