A sus 17 años alumnos de Prepa Tec fungen como asesores de la Incubadora Social del Tecnológico de Monterrey, Campus Puebla en áreas de logística, mercadotecnia y organización del trabajo. “Granja La Tierra” es el primer caso de éxito en el que los preparatorianos efectuaron mejoras en sistemas de cultivo orgánico, implementación de tecnologías verdes y utilización de plantas silvestres en productos alimenticios.
Yolanda Garza Ramírez, catedrática de Prepa Tec, explicó que este proyecto formó parte de la materia “Taller de Negocios de Emprendedores”, cuyo objetivo consistió en adentrar a los alumnos en el emprendimiento a través de un caso real; es decir, “una empresa en operación que requiere de asesoría para ser más competitiva”, dijo.
Por esta razón, los alumnos decidieron asesorar a “Granja La Tierra”, empresa dedicada a la enseñanza de permacultura, funcionamiento de tecnologías limpias, construcciones con sistemas de tierra, cultivos orgánicos, fauna silvestre y platillos de temporada con plantas silvestres de uso tradicional.
Selene Agustín Serrano, directora de esta granja didáctica, comentó que desde hace cuatro años, el negocio no contaba con una planeación estratégica que le permitiera ser más competitiva en el mercado.
“Lo que buscábamos era conocer a nuestros clientes. En principio nos enfocamos a estudiantes de primaria y secundaria; sin embargo, con la asesoría de los alumnos de Prepa Tec detectamos que la empresa debía estar dirigida a un nicho de mercado conocedor de la botánica, biología y agronomía”, comentó la directiva.
Con este enfoque los alumnos se dieron a la tarea de crear una página web, un perfil en redes sociales como Facebook, generar una galería de fotos de la granja, diseñar trípticos, “todo esto, con el fin de tener una mayor organización y brindar un mejor servicio al cliente”, especificó la catedrática.
Otras propuestas de los alumnos estuvieron relacionadas con la organización del mismo negocio, tales como reglas de limpieza rutinaria, colocación de letreros de localización de áreas.
Agustín Serrano consideró que el trabajo realizado por los alumnos “me ha motivado más en seguir con el proyecto, me dieron objetivos precisos y me hicieron críticas constructivas que me permiten observar lo que como equipo no veíamos”, concluyó.